Rara

Por Cristián Muñoz Viveros. 

Desde el inicio de la pandemia he estado trabajando alternadamente en casa y la oficina. Al final me quedé solo en casa, instalado en el comedor, con todos los inconvenientes que eso implica, donde debo armar y desarmar continuamente mi “instalación” de oficina. Lo bueno es que tengo vista a un árbol del jardín que ha sido parada de un sin número de aves que no veía por estos lados. 

Algunas son comunes como los zorzales o gorriones, pero han aparecido otros como chercanes y una especie que se llama Rara (Phytotoma rara) que había divisado el año anterior una vez, sin saber cómo se llamaba. Con un par de aplicaciones que vi en @larutadelasaves he podido identificarla y a otras que aparecen de pronto. Les dejo agua en una pileta y llegan a beber y bañarse. Rara no, ese llega en pareja, comen unos frutos del árbol y se van. Lo mejor es que es una especie clasificada como “poco común” así que me siento afortunado de verlos casi a diario.

Aprovechando el sol de la tarde, pero escondido del viento frío, también me he podido instalar a dibujar parte mi jardín. 

Las margaritas amarillas o Euryops ectinatus, arbusto que se adapta bien a estas zonas ventosas y sin mucha agua, empiezan a florecer. Al menos las flores no saben de cuarentena.

Materiales: 01 hora c/u; Acuarela Van Gogh; Sakura Micron 0,1; Pincel de agua Pentel; Portamina Rotring 0,5; Cuaderno 44 x 30 cm papel 200 gr.